miércoles, 13 de junio de 2012

Life is short.

Te despiertas una mañana y vas a cumplir 22 en dos días. La sensación es rara, porque piensas que se te ha pasado volando aquellos tiempos en los que todavía tenías 18 y pensabas que siempre sería todo igual, parecía erróneamente que el tiempo no avanzaba.

Y de pronto, los años vuelan, mucho más rápido que antes. Pasa mucha gente por tu vida, la mayoría se van, otras aguantan, y se quedan contigo. Vives inténsamente tanto lo bueno como lo malo. Debe de ser por eso; el motivo por el cual, tengo la sensación de que cada vez todo va más rápido.

En este año que ha pasado, me he transformado, creo que he ganado madurez, constancia, y más carácter. También he cometido errores, algunos desastrosos, que han hecho daño a terceros. Te equivocas de elección a veces, es inevitable, pero siendo honestos, hay cosas que, sencíllamente, no se pueden evitar, así como hay personas, que no te merecen.

La vida es demasiado corta. Demasiado corta como para dar explicaciones de lo que haces o dejas de hacer. Demasiado corta como para nostalgias o para arrepentirte de decisiones que ya no se pueden cambiar. Las personas importantes de verdad en tu vida, te aceptan tal y como eres, en lo bueno y en lo malo, y lo mismo debe hacer uno mismo.

De eso se trata, vivir inténsamente, tratar de alcanzar la felicidad en este pequeño espacio de tiempo que se nos ha dado, antes de que llegue el inevitable final. Cuando llegue, al menos por decir que lo has conseguido. Que por fin, te sientes completo :)

No hay comentarios: