jueves, 28 de julio de 2011

Tras la tormenta...

Al final, tras pasar los peores momentos, sabes que el sol siempre volverá a salir.
Puede que el desánimo y el pesimismo se adueñen de tu espíritu en ocasiones, que irremediablemente no podemos evitar.
Pero una vez superado el mal trago, y haber aceptado la realidad y el presente, enterrado el pasado y vislumbrado en futuro, el corazón, parece llenarse de energía hasta rebosar una vez más.
Todos tenemos maneras diferentes de hacer frente a los problemas que se nos presenten en el día a día a lo largo de nuestra vida, y está claro que hay gente que tiene facilidad para caer y volver a levantarse.
Ahora ya no caeré más.
Las circunstancias podrán presionarme para que caiga al suelo, pero jamás me derrumbaré. Ahora creo que he recuperado ese chispa que experiencias desafortunadas mermaron.
Aceptarse a uno mismo, y alcanzar tus metas y sueños, o caer en el intento.
No puedes consumirte si no estás en llamas...
¡Que comience el incendio!

miércoles, 27 de julio de 2011

The end.

Cada día que pasa, tengo más claro que solamente se pueden hacer dos cosas con el pasado. O extirparlo de raíz de tu mente y echarlo a las brasas, o bien renovarlo, y mejorarlo.

Esa sensación de estar encadenado a hechos que ya sucedieron hace tanto, esa sensación que te obliga a actuar de una determinada manera, casi siempre equivocada y opuesta a tus intereses y por lo que siempre terminas quedando como un payaso patético o como el malvado bastardo de la típica película de turno.

Ya está bien.

El mundo es un desastre, pero uno no debe inculparse por todo lo que sucede, sino aceptarlo, y quedarse con lo mejor, puesto que no todo está bajo tu control, de hecho, nada lo está si somos realistas. Un día estás en el momento más espléndido de tu vida y puede que la muerte te espere al cruzar la esquina, ¿y a quién le importa? El final siempre nos alcanza a todos, lo importante es si has sabido aprovechar tu tiempo.

Siempre he querido conservar lo mejor del pasado, intentando obviar lo negativo, las cosas que realmente pesan en el espíritu, pero me parece que se acabó. No es posible lo uno sin lo otro, y no depende de mi.

This is the end, my only friend, decía Jim Morrison.

Este es el final, querido pasado, que tantas veces has sembrado de dudas mi mente y mi corazón. No marchitarás este espíritu solitario ni una sola vez más.

Dado que el tiempo se nos agota, y que nunca se sabe cuando puede llegar ese final, solo queda intentar la cosa más difícil de este mundo:

Ser feliz.

martes, 26 de julio de 2011

Sensación de insomnio.

Es cuando sientes que el tiempo pasa despacio, demasiado despacio.

Sientes una losa de mármol en la frente y tu cabeza expresa su particular queja en forma de dolor.

A veces se te vienen a la memoria momentos de tu vida sin relación aparente.

Estás dormido, y estás despierto.

Eres la línea paralela que separa lo real de lo que no lo es.

Cuando no puedes más y tu cuerpo se rinde momentáneamente, recuerdos y presente se entremezclan, y aparece una especie de sensación de nostalgia por momentos que ya forman parte del pasado.

Es cuando añoras el comfort que permitía que tu mente no permaneciera despierta durante las noches, torturando tu cuerpo.

Con el tiempo, la sensación de nostalgia, da lugar a la resignación, y de esta, deriva la fuerza para continuar adelante, y la motivación para volver a encontrar la tranquilidad de tiempos pasados, pero en los que a diferencia de lo anteriormente vivido, por cada momento bueno no hay dos o tres malos.

Me pregunto porqué la mente no descansa...

¿Será la soledad, abrazada desde el nacimiento, y retomada una vez más? ¿O el recuerdo nostálgico de saber que podías haberlo hecho mejor y no lo hiciste?

Ya da igual.

lunes, 25 de julio de 2011

Mar adentro.

Se acerca el momento.

Momento de elegir, pero no para mi, yo ya he elegido hacia donde mirar, hacia el futuro, hacia un nuevo amanecer, con nuevos vientos que soplan las velas de la vida con optimismo y firmeza.

Ahora que conozco el camino, sólo queda por decidir el cuando embarcar, y es más, ¿con quién?

Supongo que eso lo dirá el mañana, pero a veces parece demasiado oscuro el horizonte como para poder discernir algo claro.

Me conformaré con aguardar paciente, embarcaré y navegaré mar adentro.

Quizá alguien decida embarcar en este solitario navío que vaga por el océano de la existencia con un rumbo fijo, a la par de desconocido, pero anhelante de noches de luna llena y brisa fresca.

domingo, 24 de julio de 2011

La única opción.

Nunca existe lo bueno sin lo malo, ciertamente.


Es impresionante como se materializa esta verdad universal
en cualquier momento de tu vida. Puedes haber ganado un partido importante,
haber hecho un gran concierto, o haber ganado un concurso tal vez, y sin
embargo, hasta la más dulce victoria tiene un sabor agridulce cuando algo
falla.



En determinados momentos, el vaso está exactamente tan vacío
como lleno.



La opción de verlo de una forma u otra depende de uno mismo.


Siempre he considerado que uno debe ser o intentar ser
optimistas, pero en ocasiones, es difícil cuando suceden ciertas cosas
desafortunadas, que empañan las cosas realmente importantes y buenas.



Hay que tratar de ser lo suficientemente fuerte como para
enfrentarse a tus derrotas, a tus fracasos, saber sobreponerse y seguir
adelante.


No es fácil, nunca lo ha sido, pero sin duda, es la única opción,
nunca ha habido otra, ni nunca la habrá, no para mi.



jueves, 14 de julio de 2011

Miedo-Verdad-Vida.

Nunca es demasiado tarde para aceptar que la vida no es realmente vida, si vivimos con miedo.

Pero, ¿miedo a qué? Existen tantas formas de materializar el miedo como personas habitan en el mundo, para algunos, toma forma de miedo a la muerte, miedo a lo desconocido, miedo a lo que no comprenden.

Algunos incluso, tienen miedo a ser tal y como son realmente.

¿Es posible deshacerse del miedo? Eso depende de cada uno. Para ello, debemos enfrentarnos a él, y aceptarlo.

Sencillas palabras, cuya práctica se vislumbra ardua y complicada, o al menos, aparentemente.

No obstante, el miedo, solo depende de nosotros mismos, está en nuestra mente, y por ello nace de nuestro interior. Por ejemplo:

¿Por qué se le teme tanto a la muerte? Es la secuencia lógica de la vida, su contraposición, como el bien y el mal. ¿Qué sentido tendría la existencia de un extremos sin el otro? Ninguno.

La única forma de salvarnos del miedo, es aceptar la verdad, y la verdad es, que en esta vida todo es tan efímero que no merece la pena temer nada.

Lo realmente triste es que la gente no es capaz de entender que quizá el problema de su propia desdicha o estado de ansiedad, por el día a día, o sobre qué sucederá mañana, se encuentra en ellos mismos.

La verdad a veces, se esconde tras elaborados disfraces, que solamente pueden ser descubiertos por quienes sepan observar con atención no solo el exterior, sino el plano interno de las cuestiones de la vida.

"Por el poder de la verdad y mientras viva, habré conquistado el universo"

Para mi significa que solo aceptando la verdad, podremos ser capaces de vivir con plenitud, y ser capaces de alcanzar nuestros sueños. Solo a través de enfrentarte a tu temores y aceptando la verdad, puedes aceptar la vida tal y como es.

martes, 12 de julio de 2011

Responsabilidad.

La responsabilidad es una carga de la cual nadie quiere hacer cargo y sin embargo de la que todos pretenden disfrutar de las ventajas de quien la soporta.

¿Qué quiero decir? Que es muy fácil limitarse a echar la culpa a los demás de los errores cometidos, o desentenderse de asumir la culpa que te corresponde.

Todos tenemos que entender que hay factores y otras circunstancias no controlables, y que cuando alguien se ocupa y tiene la buena voluntad de aceptar la carga de una responsabilidad, los demás deben tratar de echar una mano...¡Pero no al cuello!

Siempre intentaré cumplir con las cargas que he decidido sobrellevar, pero a veces se necesitas ayuda, o por lo menos, ¡no verte hostigado!

domingo, 3 de julio de 2011

El mañana es hoy.

Aprovecha el momento, y las oportunidades que te ofrezca la vida, porque puede que no vuelvan a darse.

Últimamente he estado pensando que la vida es demasiado corta, o en otras palabras, muy desaprovechada, por el simple y mero hecho de que nos planteamos demasiado las consecuencias de nuestros actos, las repercusiones, el que dirán. ¿Pero todo eso realmente sirve de algo?

Cuando pienso en el que dirán, me vienen a la cabeza los innumerables ejemplos de mediocridad que aparecen en la vida política española o del extranjero, y me digo a mi mismo, ¿cualquiera de estos sujetos se plantea las consecuencias de sus escándalos? Lo dudo, al final la gente lo olvida, no tienen memoria, eso solo funciona para pequeños cotilleos locales.

Y no doy a entender con esto que tenemos que dedicarnos a la picaresca y al engaño, pero no dejar nunca que nos timen, andarse con ojo, y tener en cuenta que la mejor defensa es un buen ataque como bien decía Napoleón.

Durante las vueltas a casa tras salir de marcha, siempre me pongo a reflexionar, y anoche llegué a la conclusión de que no se puede esperar nada, si realmente quieres algo, ve a por ello, porque muy difícilmente vendrá hasta ti.

El mañana es hoy, como dice la canción de un buen amigo, y yo no pienso perder más el tiempo.

Vida solo hay una, y la disfrutaré mientras dure.