martes, 25 de octubre de 2011

Incontrolable.

Durante la vida diaria de cada uno, siempre le tocan vivir situaciones complicadas, y terribles sin duda.

A días que tienes que tragarte a gente insoportable, administraciones inútiles y otras estupideces cuyo fin último es amargarte y destruirte definitivamente.

Es duro resistirse a la tentación de hacer pedazos esos obstáculos inservibles que tratan de dañarte en el día a día. Pero debes buscar una forma alternativa de liberar toda esa energía negativa.

Claro, que lo que uno a veces quiere no es lo que le conviene, y dejarse llevar por los sentimientos podría causar un desastre fatal. Esa energía incontrolable se puede usar para otros fines, como el ejercicio físico (cualquier vertiente) o para escribir.

Yo procuro descargarme aquí, escribiendo. En el plano físico también. Si no lo haces, corres el riesgo de explotar y hacer daño a los seres que quieres por culpa de la mierda que te rodea.

lunes, 24 de octubre de 2011

Disciplina.

Cuesta demasiado ponerse manos a la obra cuando te acostumbras a estar ocioso. Es una pena, pero es más duro de lo que parece.

Ya va siendo hora de ponerse manos a la obra.

Sin embargo, siento que estoy en un buen momento de mi vida. Las cosas están estabilizadas y los cimientos están puestos para una buena época.

Ahora toca ponerse a construir, pero como en cualquier construcción, las Catedrales no son fáciles de levantar, requieren tiempo, sacrificios, y muchos esfuerzos, algunos se verán recompensados, y otros no tanto.

Lo importante, como siempre digo, es no perder el norte, ni los objetivos que tengas en mente.

Solamente hay un camino, seguir la senda hacia el éxito y hacia el triunfo.

miércoles, 19 de octubre de 2011

La corriente fluye.

¿Para qué empeñarse tanto en cambiar las cosas?

Nos pasamos tanto tiempo a lo largo de nuestra vida intentando presionar para evitar que las cosas vayan en un sentido y que vayan hacia otro, derrochando energías, para que finalmente, terminen saliendo de una forma u otra.

Antiguamente, creía que los planes bien elaborados, solamente dependían de una buena ejecución. Es como cuando un entrenador planea un partido, diseña sus tácticas y valora las respuestas del rival en un caso u otro, para darse de bruces contra la pared, cuando finalmente una milésima de segundo lo cambia absolutamente todo.

Te preguntas: ¿por qué?

No hay respuesta. Llámalo como tú prefieras, casualidad, destino, suerte, la decisión divina, etc. De cualquier forma, a veces saldrá la cara de la moneda que has elegido, y otras no.

Cuando no salen bien, lo normal es que te invada una sensación de ansiedad e impotencia, porque piensas que lo que has hecho, y el tiempo perdido no sirven para nada. Pero al contrario, si que tienen una utilidad.

La experiencia. La vas ganando en cada derrota (en las victorias, muchas veces extraes el éxito, no se reflexiona lo importante, la forma de lograrla) que te obliga a rebanarte los sesos.

Sin explicación, a veces más vale no buscarla, porque puede que tu único resultado sea la frustración. Por eso, muchas veces lo que mejor puedes hacer es dejar que la corriente fluya, y seguirla, porque no siempre podrás nada contracorriente; no siempre podrás obtener lo que quieres ni lo que esperas.

La clave, es la paciencia, y la serenidad.

martes, 18 de octubre de 2011

El día siempre depara una sorpresa.

Cuando te levantas en un día de amanecer gris, en cierto estado de ansiedad, tras varios sueños sin sentido pero muy reales, crees por inercia, que el día no marcha bien. Es lo que se llama levantarse de la cama con el pie izquierdo.

Van transcurriendo las horas, haces tus labores con normalidad, y al final, cuando haces balance del día, te das cuenta de que todo ha salido mejor de lo esperado.

Por eso, no siempre lo que mal empieza mal acaba, puede ser diferente. De nosotros depende ser capaces de captar ese lado bueno que a veces suele estar tan oculto en la vida cotidiana, que se materializa en una noticia, una buena conversación, ver un partido con los amigos...

Sin duda, son esas pequeñas cosas las que llenan nuestro vaso, las que hacen que haya más luz que sombra en el día a día.

Por supuesto, el día a día siempre te depara una sorpresa, siempre algún motivo por el que sonreir.

domingo, 16 de octubre de 2011

Reconfortante.

Es domingo, y puede que en otros tiempos, hubiera estado en cierto estado de ansiedad, pensando en que mañana empezaría todo una vez más, esa rutina destructiva y agotadora de espíritus que tanto daño me ha causado.

Pero hoy es diferente. Hoy me siento diferente.

Ahora, por fin, las cosas están saliendo bien, ha costado, pero creo que estoy en la dirección correcta.

Hacía mucho tiempo que no pasaba un finde tan completo y con la mente tan despejada. Sin duda había olvidado, lo reconfortante que es, saber que llegará el mañana, y que el sol lucirá en el firmamento de un nuevo día, con nuevos sueños, y nuevas esperanzas.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Silencio.

A veces no hay nada más reconfortante que el silencio.

Cuando te concentras en no pensar en nada. Desconectas, te olvidas del mal que te rodea y que te aprisiona, aunque sea unos breves instantes, que sientan como una bocanada de aire fresco para tu espiritu extinto.

Es curioso. Muchas veces cuando consigo lo que quiero, no me doy por satisfecho; tengo esa sensación de que lo logrado es poco y no me reconforta.

No sé si tal vez, siempre será así, el inconformista supremo. Apostaría a que si.

Ya me he caído demasiadas veces como para seguir de nuevo con lo mismo. Estoy cansado de caer, zancadilleado por circunstancias aleatorias y por otras causas que no controlo.

Lo mejor del silencio, es que te ayuda a pensar con claridad, a pensar objetivamente, sin emociones que enturbien la verdad.

Y la conclusión que he sacado es clara.

Nadie me volverá a hacer caer jamás.

domingo, 9 de octubre de 2011

Visión optimista.

Pese al machaque brutal que he recibido desde el comienzo de las clases en la facultad, que ha quedado reflejado en anteriores entradas de este blog, hoy me siento distinto. Tengo ganas de ponerme en marcha.

Creo que, por primera vez en mucho tiempo, las cosas van a cambiar definitivamente.

Estoy recopilando información sobre la posibilidad de marcharme a la UNED, algo que ya hace tiempo tenía en mente, y que hoy más que nunca, veo necesario y además prioritario.

Además de eso, pronto empezaré a preparar las oposiciones de Auxilio Judicial, con mucho ánimo y con ganas de ganarme el puesto. Será complicado, la competencia, brutal, a fin de cuentas en esta época un puesto así sería prácticamente como encontrarse con un oasis en medio del desierto.
No obstante, mi ánimo no decae por eso. Con la motivación apropiada, uno puede conseguir lo que quiera.

Esta vez, mi motivación es el futuro, mi realización personal, convertirme en una persona con fuerzas renovadas, con ganas de trabajar y ganarme un sueldo, con ganas de seguir estudiando por mi cuenta sin carcamales que te atormenten y te falten el respeto sin motivo en una clase.

Hoy más que nunca, tengo una visión optimista del conjunto, y espero que perdure el máximo tiempo posible =)

jueves, 6 de octubre de 2011

¿Por qué? ¿De dónde os han sacado?

No, no soy Mourinho. Aunque de hecho, si que me hago la misma pregunta.

Esta mañana, se ha celebrado espontáneamente un debate sobre el motivo que ha llevado a muchos alumnos del grupo de mañana a "escapar" hacia el grupo de tarde en la facultad de Derecho en el curso de tercero-cuarto.

A priori, es un hecho ilógico, dado que cambiarse de al turno de tarde implica salir tarde, llegar a la hora de comer, o justo después de comer...Mmm. Hay algo que no cuadra, ¿verdad?

Bueno, pues yo si que tengo un "porque"

Si la mayoría de los alumnos han escapado, no es precísamente por la comodidad del turno de tarde (que es nula) ni porque las asignaturas que se imparten en tercero y en cuarto sean complicadas.

El verdadero y único motivo por el que ha tenido lugar este triste fenómeno es por la desidia. Si, esa palabra que tanto me gusta emplear, pero no porque me guste, sino porque es algo demasiado común por desgracia, especialmente en esta Facultad.

Como comprenderán, no pienso hacer referencia por nombre ni apellidos, porque podría estar vulnerando su derecho al honor. Pero sencíllamente, no hace falta, porque todo el mundo los conoce.

¿Cómo podría ser de otra manera? Tanto estas personas que se han cambiado, o los que seguimos de mañana, lo sabemos bien. Sabemos que hay 4 jinetes del Apocalipsis (en cuarto se han sumado muchos más, la banda aumenta) que se han encargado de machacarnos.

"J", "F" ,"B", y "C" Uff. La banda invencible. Para no desarrollarme mucho, diré que se caracterizaba dicho grupo por mútiples habilidades.,

Que agradable, cuando te gritan en vez de hablarte, atravesando las paredes una voz chirriante que además, va penetrando en las pobres y desgraciadas mentes de otros alumnos en otras aulas. Mucha voz, mucha cháchara, explicación nula, y exigencia máxima en el examen. Bien.

Ah si, o leer un Código de Leyes con la manita en la boca que impide entender nada, dar mil vueltas y no llevar orden en tus explicaciones y luego ir a con la espada en mano y el cuchillo en la boca al examen, si señor. ¡Por favor, sálvame!

Que decir ya de los soberbios. Dicen que es el pecado original, de los pecados capitales. Y vaya que si lo es. Algunos lo ponen en práctica dando clase, suspirando, tratándote como a basura, mirándote por encima del hombro.

Y luego el ejemplo modélico: el que llega felízmente a clase, y se dedica a leer un libro. Diría que el menos malo, porque su efecto es adormecedor, y sin embargo, exigencia máxima en el examen, cuando lo único que ha hecho es leer un libro, venir a cobrar un sueldo extra y marcharte a tu despacho.

Creo que si que entiendo porque han escapado. ¡Lo que no me explico es que hago yo aquí todavía!

martes, 4 de octubre de 2011

Sobre las obras de la autopista del sur, norte y la incoherencia de los conductores.

Ciertamente, este tema me tenía bastante quemado, y he aguantado bastante sin hacerlo constar por aquí

En primer lugar, quería hacer constar a todos el que lea este blog, mi particular denuncia a las obras que se están llevando acabo en la curva de Las Caletillas,en la autopista del sur, y al mismo tiempo, lo sucedido en la carretera de Añaza que conecta con TF-5.

Bien. Más o menos en el mes de agosto si mal no recuerdo se empezó con el tema de las obras en la carretera que conecta con TF.5. ¿Resultados visibles o mejoría? Ninguna en ese mes, sino todo lo contrario, continuamente se deja un solo carril de los dos que hay disponibles provocando atascos que se extienden hasta la entrada de Añaza en TF-1. Llega septiembre. Más de lo mismo, todo manga por hombro, colas inmensas, un solo carril para circular, y no se detecta movimiento (quizás las empresas encargadas se lo toman con calma) en el trabajo de las obras. Se acaba el verano y la situación es terrible. Ahora, día 4 de octubre, más de lo mismo. colas inmensas, y obras que no terminan. ¿Qué estarán haciendo? ¿Realmente sirve para algo? Diría que no.

Y la segunda cuestión. Creo, y me van a disculpar, que en este país, más de la mitad de la gente que tiene carnet de conducir, no saben conducir, bien porque no se les da o porque hace lo que les sale de donde todos sabemos. En el caso de la curva de Las Caletillas, se están llevando a cabo una obra por la que se ha cortado otro carril, dejando 2. Ya se pueden imaginar (y lo habrán vivido muchos) el atasco que aparece cada dos por tres ¿Por qué circulan por la izquierda si no están adelantando una vez que ya se disponen de los 3? O en otro caso muy interesante ¿Por qué no colaboran (a mi me ensañaron así, será algo fuera de lugar) para que los que quieren incorporarse a una rotonda puedan pasar? ¿A qué se debe esta falta de civismo y falta de escrúpulos?

A lo de siempre señores, a que en este país lo que prima es el interés de uno mismo frente a todos, y así nos va. No prima el interés general, como en el caso de las culturas del norte de Europa, ni nada de eso. ¡Por favor, hagan algo! Solucionen de una vez las obras faraónicas que solamente contribuyen a amargar a los ciudadanos que se despiertan temprano para llegar puntualmente a su trabajo o a su facultad, y se topan con cosas así, en una isla tan pequeña. ¡Esto no es Madrid! ¡Ni Barcelona!

Y de paso, intenten concienciar a los conductores ineptos y hagan que aquellos que dolosamente ponen en peligro la seguridad vial del resto, sean castigados, y no el pobre desgraciado que deja el coche mal aparacado 3 minutos en un vadopor una emergencia.

En un país con tantas administraciones (estatal, autonómica, local y los Cabildos en el caso de Canarias) el grado de incompetencia y de ineficacia es tan abismal que a uno le hierve la sangre pensando en otros que no se preocupan de estos asuntos porque tienen chófer, otros helicóptero privado (Paulinato) etc. Pero esa, es otra historia.

lunes, 3 de octubre de 2011

Balance de cuatro años en Derecho. Crónica de un infortunio.

Esta mañana, he empezado a pensar en cuanto tiempo llevo aquí, en esta facultad, y me ha dado la impresión de que han pasado muchos años. Realmente, han sido tres, y ahora empezando el cuarto, sin embargo, da la impresión de haber sido diez.

Se me ha ocurrido hacer una breve crónica de mi viaje en esta licenciatura de Derecho impartida en la ULL, marcada por la desidia, la estupidez y la incompetencia.

Primer año: tras terminar la PAU, empezaba con muchas ganas la carrera por la que me había decidido. Ese año, me gustaron 3 de 4 asignaturas que se me presentaban, en especial Derecho romano e Historia del Derecho. Era un sueño hecho realidad, con horarios perfectos, clases amenas y entretenidas por lo general, y motivación alta. Ese año, fue sin duda, el mejor de la carrera.

Segundo año: tras sacar todo primero, empezó el segundo curso. Ya empezaba a darme cuenta de que aquí no todo iban a ser clases interesantes y buenos horarios. De asignaturas interesantes, pasamos a asignaturas obsoletas e inútiles, que eran (y son) impartidas por profesores pedantes y prepotentes, cuya forma de entender las clases se basan en exponer su ideología personal en cada explicacion. Me encontré con una asignatura difícil pero interesante como era Penal I, o Politico II y algunas que sobra mencionar. A grandes rasgos 2 de 5 asignaturas escapaban. El promedio iba en descenso. Las saqué todas, no sin pasar algún apuro.

Tercer año: este es el punto de inflexión, o si se quiere mirar, mi particular Stalingrado. Este año, me di cuenta que los rumores sobre la mediocridad, falta de modernindad y deficiencias de la carrera en esta facultad, eran completamente ciertos. Me encontré con una asignatura que me gustaba mucho, que era derecho Internacional Público. De resto, 0 patatero. No se salva ni una. Profesores cada vez más arrogantes, más amargados, más incompetentes, más exigentes, con menos vocación. En fin. 1 de 5, genial. Este año acabé con la moral destrozada. Saqué 2 de 5, patético, pero si se atiende al contexto, no es de extrañar. Empantanado en un asedio total, empecé a plantearme la idea de marcharme de aquí. Finalmente, decidí matricularme de nuevo.

Cuarto año, y en la actualidad. El panorama es tétrico. De 6 asignaturas que se imparten, escapan 2. El resto, con todo el respeto del mundo, basura. El grado de dificultad no ha cambiado, no son asignaturas más complicadas, sino profesores cada vez peores, cada vez con menos vocación, menos carisma, que plantean su clase leyendo un libro, faltándote el respeto, mostrando actitudes chulescas y cargadas de arrogancia y otros capaces de dormir a las ovejas.

Panorama nefasto. ¿Queda esperanza? Si. Sacar las asignaturas restantes de tercero, tratar de sacar todas y largarse. Ya es suficiente, no perderé un año más de mi vida amargado por profesores inútiles y a su vez, amargados, sin vocación, enchufados por políticos, gente que viene cobrar aquí un doble sueldo por la cara leyendo un libro sentado en su mesita o profesores que te faltan el respeto directamente y quedan impunes.

No era lo que me esperaba cuando empecé, en absoluto. Pensaba que la universidad sería divertida, práctica, donde podrías formarte con eficacia y terminar haciendo lo que te gusta realmente. Un lugar, donde los compañeros se apoyan unos a otros. ¡Ja! Ni por asomo. Ese es otro aspecto a mirar; competetividad sin sentido, envidias, críticas, mal rollo. Nada, sin duda, todas mis expectativas han sido, finalmente, simples utopías.

Mis agradecimientos a los profesores de Romano, Constitucional, Historia, Penal I, e Internacional, porque con ellos si que aprendí, estudié con gusto, y me atendía a clase. También a los compañeros que si me ha echado una mano cuando ha hecho falta y a los que también les he ayudado cuando he podido.

¿Por qué será que los alumnos del turno de mañana en su mayoría han huído al grupo de tarde dónde la tasa de aprobados es muchísimos mayor? Diría que es porque la docencia que se imparte por la tarde es de mayor calidad, más práctica y los profesores mejores y más comprensivos.

Hay que hacérselo mirar, amiguitos.

Ojo: este blog, no es una crítica, ni un insulto, a la generalidad de los profesores de esta facultad ni la de la ULL, solamente es una opinión personal sobre la actuación de algunos individuos a los que no mencionaré, pero que, dado que se permiten la libertad de juzgarte, insultarte, comportarse de forma altanera y prepotente, son susceptibles a ser criticados por sus actos, como cualquier otra persona, porque por mucho que algunos se lo crean, no están por encima de NADIE.