Infamia para el fútbol europeo.

Estoy sinceramente indignado como aficionado al fútbol, antes que como aficionado del Real Madrid por los hechos que tuvieron lugar ayer por la noche en el Camp Nou.

El Real Madrid, que había perdido el partido de la ida, cuyo resultado fue 0-2 (partido que se descompensó tras la expulsión de Pepe) tenía que salir al ataque a intentar buscar dos goles que le permitieran igualar la eliminatoria. Anteriormente Mourinho, entrenador de los blancos, había considerado esta gesta como una "misión imposible" y cuanta razón tenía.

El Barcelona por su parte, salía a jugar con la tranquilidad del trabajo bien hecho, a rematar la faena (ya muchos de sus aficionados auguraban otro 5-0, un 6-1, y resultados similares) contra un equipo con bajas por sanción importantes.

Sin embargo, el pronóstico de goleada no se cumplió en absoluto, gracias también a un portero único como es Iker Casillas, que detuvo al menos en la primera parte 4 ocasiones claras de gol por parte del Barcelona. Hay que señalar que el Madrid se vio surtido de faltas en contra por simples contactos, y que Carvalho se vio amonestado con la primera amarilla al poco de inciarse el partido, sentando un criterio muy claro y específico de enseñar tarjeta al mínimo contacto.

En la segunda parte tuvo lugar la infamia: en una jugada en la que Higuaín supera a Valdés y hace el 0-1, el árbitro anula la jugada por una supuesta falta de Cristiano Ronaldo a Mascherano. Analizando bien la jugada, no se sostiene la decisión arbitral, por cuanto Cristiano cae involuntariamente tras la falta que le hace Piqué, tras lo cual debería de haber aplicado la ley de la ventaja a favor del Madrid.

Esta nimiedad, cambio el resultado del encuentro, por lo menos por lo que hubiera significado moralmente ponerse 0-1 por delante en el marcador para el Real Madrid. La historia no fue así, y posteriormente marcaría Pedro Rodríguez a pase de Iniesta, lo que sentaba el 1-0 eliminando así cualquier posibilidad de remontada. De nada sirvió ya el gol anotado por Marcelo, ya estaba hecho.

No me quejo aquí por el hecho de que el Madrid cayera dignamente, me indigna ver el trato de favor de la UEFA hacia el Barcelona, que se traduce en el gol anulado, la expulsión de Pepe en la ida (que no toca a Alves) etc, etc. Cuando Mourinho clamó al cielo hace una semana recordando Stamford Bridge y lo sucedido hace un par de años, quise pensar que lo decía en un momento de enfado y ya está, pero no es así, lo que decía era cierto.

Le deseo mucha suerte al Manchester o al Shalke 04 cuando pasen a la final, porque delante no solo van a tener a un equipo, sino a la UEFA y a los árbitros en su contra con toda seguridad. Espero que les dejen jugar al fútbol y que no ejerzan una influencia tan decisiva como han hecho en esta semifinal. Deseo que algún día, el fútbol vuelva a ser un deporte de honestidad y transparencia, y no donde los árbitros se declaren fans de jugadores, ni donde no se castiga el teatro dentro del campo, aunque quizá espero demasiado.

Saludos.