lunes, 2 de enero de 2012

Nuevo año, nuevo capítulo.

Tras dejar atrás un año bastante extraño, damos paso a un nuevo capítulo más en esta historia. 2012.

Como no podía ser de otra manera, empiezo el año con una nueva entrada de estas de medianoche. La noche de fin de año no fue algo especialmente destacable, puesto que me topé con un ambiente inesperado, que se salvó por la compañía de un buen amigo, y sobretodo, por la actitud.

Sigo pensando que nuestra forma de pensar es lo más importante. La forma en que nos enfrentamos a los acontecimientos, tanto favorables como adversos. A veces nos puede dar la impresión de que se nos escapa el control de la situación, pero todo es mental. Si eres capaz de controlar tus emociones, y jugar bien tus cartas, puedes salir airoso de cualquier reto, de cualquier lucha.

El año pasado caí demasiadas veces en ese estado de impotencia, de pensar que por mucho que luchara, sería inútil, pero se acabó. Esta claro que no puedes ganar todas las batallas, pero si que se pueden elegir en cuales combatir. Esa es la clave.

Y aunque no consigas todo lo que esperabas, siempre tendrás el mañana. Un nuevo día, una nueva oportunidad.

De esta manera, al final, siempre tienes la opción de ganar, pero todo depende de la forma en que veas las cosas, y como te orientes en la realidad.

No hay comentarios: